Las hazañas de la victoria 7.25

Pyongyang -- Quedó publicada el día 25 la información de la Agencia Central de Noticias de Corea sobre las inmortales hazañas del Generalísimo Kim Il Sung realizadas por la victoria en la Guerra de Liberación de la Patria (1950-1953).
El texto resumido de la información titulada "Será eterna la historia de gran victoria en la guerra frente al imperialismo norteamericano" sigue abajo:

Victoria fulminante de la gran idea Juche, la del Songun
El Presidente Kim Il Sung resolvió en el principio de la idea Juche todos los asuntos determinantes de la victoria en guerra dando pruebas de su extraordinaria perspicacia ideo-teórica.
El 25 de junio de 1950, día de estallido de la guerra coreana, pronunció un discurso titulado "Aniquilemos a los agresores armados mediante la contraofensiva decisiva" en la reunión extraordinaria del Consejo de Ministros de la República Popular Democrática de Corea y al día siguiente, hizo otro discurso por radio dirigido a todo el pueblo coreano.
En esas ocasiones, aclaró que la guerra coreana es producto directo de la agresiva política exterior de EE.UU. para la hegemonía mundial y deviene para el pueblo de la RPDC la justa Guerra de Liberación de la Patria para defender la libertad, la independencia y la democracia de la patria.
Trazó la idea estratégica del Partido por la victoria a base de la posición y el papel que juegan el hombre y las masas populares en la guerra revolucionaria.
En sus discursos radiales transmitidos a todo el pueblo el 26 de junio y el 9 de septiembre de 1950, presentó la idea de patriotismo y unidad consistente en librar la Guerra de Liberación de la Patria como la de todo el pueblo.
En todo el curso de la guerra, planteó el pensamiento de mantener con firmeza la superioridad ideo-política y estratégico-táctica del ejército.
A través de sus obras y discursos, el Presidente Kim Il Sung dio profundas explicaciones sobre la superioridad ideo-política y estratégico-táctica del Ejército Popular de Corea, que no puede tener ningún ejército imperialista ni el de la clase explotadora reaccionaria, y su poderío y el papel que juega ella en el cumplimiento de la guerra revolucionaria, y enseñó las tareas y remedios para ponerla de manifiesto.
En otros discursos importantes, presentó la idea de cubrir en el principio de autoconfianza las demandas materiales del frente conforme a las características de guerra moderna, la situación del país y al entusiasmo patriótico del pueblo coreano. Igualmente, dilucidó específicamente las demandas de principio y remedios para poner en práctica esa idea.
Ocupa una posición importante en las ideas estratégicas del Presidente Kim Il Sung la de combinar correctamente las batallas de grandes unidades y las de pequeños destacamentos, los combates regulares y los guerrilleros y los en zonas montañosas y los nocturnos.
La victoria en la trienal Guerra de Liberación de la Patria fue la de la idea Juche, la del Songun, caracterizada por el aprecio al hombre y el amor al pueblo, frente a la idea agresiva y misantrópica del imperialismo que pretendió colonizar nuevamente al pueblo coreano.

II victoria de perspicacia genial, destacada estrategia y táctica y método de combate
La joven República y el pueblo, que datan de los 5 años desde su fundación y de 2 años apenas desde cuando se fundó el ejército regular, venció a Estados Unidos, cabecilla del imperialismo mundial, que se jactaba de la historia de agresión de ciento y tantos años, la superioridad numérica y tecnológica, lo que se debe enteramente a la genial perspicacia militar, la destacada estrategia y táctica y método de combate.
La embestida de Seúl de la División de Tanques 105 y la izada de la bandera de la RPDC en la Capitolio y otros logros alcanzados durante los 3 días desde el inicio de la guerra y la operación de liberación de Seúl azotaron de raíz el sistema de dominación colonial de EE.UU.
Según el método de combate iluminado por el Presidente Kim Il Sung, en el mar frente a Jumunjin con solo 4 torpederos los valientes marineros del EPC hundieron el crucero pesado del imperialismo norteamericano "Baltimore" y destruyeron el otro ligero, realizando gran hazaña registrable con letra dorada en la historia de guerra naval del mundo.
Es imposible pensar al margen de la sabia dirección del Presidente en la brillante victoria de la operación de libración de Taejon donde se creó el gran ejemplo de la guerra de cerca moderno, los sucesivos combates de aniquilamiento por asedio por doquier, la operación de ataque a la "base de Pusan" de los enemigos, la creación de la "crisis de Taegu" y otros prodigios militares.
A principios de la guerra los uniformados del EPC eliminaron los principales colectivos del ejército títere surcoreano y dieron golpes demoledores a las tropas agresoras yanquis, mientras liberaron más de 90 % de las regiones surcoreanas y más de 92 por ciento de la población surcoreana.
Los considerables éxitos en el combate en la primera etapa de la guerra demostraron la idea militar y método de combate autóctonos, el destacado arte de mando y la grandeza y la vitalidad.
Todos los métodos de combate presentados en este período son los nuevos y originales adecuados a la destallada topografía y situación del país.
Todo el ejército y el pueblo de Corea otorgaron el 7 de febrero de 1953 el título del mariscal al Comandante Supremo del EPC Kim Il Sung quien acumuló imborrables hazañas en la historia de la Guerra de la Liberación de la Patria en reflejo de infinita veneración.

III Victoria de dirigente y fuerza espiritual del ejército y el pueblo

La victoria en la Guerra de Liberación de la Patria fue la de la convicción revolucionaria y la audacia sin par del Presidente Kim Il Sung y la fuerza espiritual del ejército y el pueblo unido monolíticamente en torno al líder.
La audacia valiente y firme voluntad del Presidente sirvieron de la fuente principal de la
indoblegable fuerza espiritual y de una fuerza motriz del espíritu patriótico que demostraron el ejército y el pueblo coreanos en los días de guerra.
La firme voluntad de defender a costa de la vida a la Comandancia Suprema y la decisión de aniquilar a los enemigos que intentaban quitar la vida verdadera y la cuna de felicidad, estos fueron la indoblegable fuerza espiritual del ejército y el pueblo coreanos que defendieron la patria con su sangre.
El Presidente quien como general juvenil de unos 20 años declaró la guerra antijaponesa contra el imperialismo japonés y lo derrotó desplegando la guerra revolucionaria de más de 20 años.
Y en la década de los 50 del siglo pasado venció a la alianza combinada de los reaccionarios del mundo encabezada por el imperialismo yanqui.
Como resultado, ya a los 40 años el Presidente recibió la veneración infinita y la confianza del mundo como genial sin precedente quien derrotó a los imperialistas y símbolo de victoria en la lucha antiimperialista.
El Generalísimo Kim Jong Il al continuar la brillante tradición del patriotismo, defendió firmemente durante decenas de años en la guerra revolucionaria sin tiroteos la patria socialista y la revolución y preparó la base preciosa para la culminación de la causa revolucionaria del Juche.
El ejército y el pueblo coreanos que avanzan hacia la victoria final uniéndose monolíticamente en torno al Mariscal Kim Jong Un, llevarán adelante la historia y la tradición de victoria en la guerra.

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